lunes, octubre 31

¡Feliz Halloween!


 
 
          Supongo que los merodeadores de Babel, al menos los más veteranos, ya sabéis lo mucho que me gusta la fiesta de Halloween. Me gusta porque es la única fiesta cien por cien pagana que se celebra en occidente, porque la gente se disfraza de monstruo, porque es divertida y le encanta a los niños y, qué demonios, porque la iglesia la condena. En fin, cada año hablo aquí de Halloween y no quiero repetirme. Quien quiera conocer mi opinión sobre esta fiesta, así como su origen y el significado de su nombre, que pinche AQUÍ.

          El caso es que el otro día vi en TV un reportaje sobre las fiestas de Halloween en los colegios y descubrí algo que me dejó turulato. En casi todos los colegios se celebra esta fiesta (de hecho, así fue como se popularizó en España) y los niños van a clase disfrazados de brujas, demonios, fantasmas y monstruos. Pues bien, resulta que en algunos colegios católicos se celebra Halloween, sí, pero a su católica manera. En concreto, los niños van a clase disfrazados de... santos y santas ¡¡¡!!!

          Aparecía en pantalla una niña, vestida con una túnica y una toca, y decía: “Soy santa Teresa”. Luego, otra niña vestida más o menos igual, comentaba: “Soy la virgen María”. Y un niño vestido sólo con túnica añadía: “Soy san Pablo”.

          Pensé: “Pero, vamos a ver, ¿se supone que es más divertido disfrazarse de san Felipe Neri que de Freddy Krueger?”. Pa mí que no. Además, cuando vayan de casa en casa ¿en vez de chucherías pedirán jaculatorias? ¿Y en vez de “trato o truco” dirán “trato o excomunión”?

          Por otro lado, hay más problemas; el de la identificación en concreto. Si ves por la calle a un chaval con tornillos en la cabeza, al instante captas que es el monstruo de Frankenstein; y si lleva cuernos, pues un diablo. Pero a primera vista ¿qué diferencia hay entre santa Agapita y santa Braulia, o entre san Juan Crisóstomo y san Pancracio? Pues ninguna. De hecho, todos los niños de aquel colegio católico (el San Pablo CEU, creo) iban iguales: con túnicas o sayos. Parecía una coral en miniatura más que una fiesta de Halloween.

          Creo que los impulsores de esta clase de fiestas han tenido una gran idea al proponerse cristianizar una celebración pagana, pero no han sabido rematarla. ¿Querían cambiar monstruos por santos? De acuerdo, pero deberían haber elegido a los santos adecuados. Es decir, a los mártires. Mucho más a tono con el espíritu de la celebración, dónde va a parar.

          Por ejemplo, un niño podría ir a la fiesta en pelotas, salvo por un púdico taparrabos, y con la piel cubierta por líneas de quemadura entrecruzadas, como un bistec a la parrilla. Y todos sabríamos que va disfrazado de san Lorenzo, al que martirizaron asándole en una parrilla. Una niña iría con un serrucho en la cintura y mucha sangre, y hasta el más burro sabría que va de santa Ferbuta, que fue martirizada serrándola por la mitad. Otro niño podría ir lleno de flechas, como un acerico, y, zas, san Sebastián. Y mi favorito: una niña podría ir con su túnica (eso que no falte) y una bandeja con dos tetas, y estaría clarísimo que es santa Águeda, en cuyo martirio le amputaron los senos.

          Todo muy católico y muy Halloween a la vez. Porque, no lo olvidemos, la iglesia tiene una antigua y amplia tradición de gore, como demuestra su signo distintivo: un artefacto de tortura.

          Queridos merodeadores, ¡feliz Halloween!
 





 

17 comentarios:

Juan H dijo...

Hola César, estoy totalmente de acuerdo. El problema del cristianismo es ese, el de "cristianizar" todo lo que coge lo que convierte en beato... quiero decir que si la religión cristiana tuvo tanta acogida y propagación en sus inicios fue debido a que comerse elementos de otras religiones y creencias, formando un amasijo bajo la cruz. Es una religión que se aprovechó de lo que otras religiones ya tenían, y siguen igual, pero a niveles tan absurdos como el que has comentado. En fin, creo que deberían de preocuparse más de otras cosas..., no sé vender lo que tienen en el Vaticano para dar de comer a los pobres o algo parecido. Y aún así, Feliz Halloween otro año más!!!!
posdata: recomiendo encarecidamente la tarta de calabaza este es el primer año que la he probado y el que viene repito, je,je. Un abrazo amigo.

Anónimo dijo...

Muy divertido y muy cierto. Creo que podrías enviar un comunicado haciéndoles saber tu propuesta, el Santo enfado que pillarían sería digno de ver. A decir verdad los cristianos siempre han tenido ese morbo por todo lo que sea dolor y sufrimiento que es su toque especial. Mi favorito es las "rodillas de cristo" unas legumbres que fueron bautizadas con un cristiano nombre desde sus orígenes. Mi abuelo me las preparaba recalcando el nombre con ironía atea. Siempre me he sentido un caníbal comiéndome los restos de un monstruo de incontables patas llamado cristo.
A propósito, como va tu cadera, sigo esperando la segunda parte de La estrategia del parásito.
Saludos desde Mataró

Javier dijo...

Pues he googleado eso de las rodillas de cristo, plato que desconocía totalmente,resultando ser una cosa muy gore y a la vez con una pinta cojonuda.

Jarl-9000 dijo...

Un aplauso. Con lo difícil que lo tienes para no repetirte de año en año y en esta ocasión te has superado, ha sido desternillante. Tiene mucho mérito, ¿eh?

Feliz Halloween, día de todos los santos, día de muertos o lo que se os encarte.

José Antonio dijo...

Me he partido mucho de risa con tu post, y es que desde que vi en las noticias que algunos católicos iban a cambiar el Halloween por el "Holy Wins" la ridiculez de la noticia sólo se podía salvar con una buena dosis de su propia medicina jajaja ese disfraz de Santa Águeda quedaría muy "mono".

Espero que hayas pasado un buen Halloween!

Juan Constantin dijo...

Saludos:

Vamos, vamos, César, a San Pancracio se le reconoce por la ramita de perejil;)


Feliz Halloween para todos.


Juan Constantin

Samael dijo...

Esto es lo que pasa: normalmente la religión cristiana se apropiaba de celebraciones paganas, al menos de sus fechas, y las aprovechaba para convertirlas en cristianas y sagradas, y ahora está viendo que, al menos en España, les están devolviendo el mismo tratamiento: una celebración religiosa, el día de las ánimas benditas, o día de difuntos, se ha paganizado y se ha convertido en la juerga de Halloween. Mucho mejor una calabaza desdentada que cualquier santo, más divertido, pero por mucho que los paganos se esfuercen en disfrazarse de cadáveres ensangrentados con los ojos morados jamás podrán superar el aspecto realmente gore de un cristo. Eso es inigualable, no me digas.

Samael dijo...

lo que dices de los colegios me lo contó Conchita y no me lo podía creer, es... patético. a esta modalidad de fiesta la llaman Holywin (lo sagrado gana). hay que reconocerles la creatividad, desde luego.

Anónimo dijo...

jajaja, Y al que se disfrazara de San Esteban igual lo tildan de homosexual, o ¿prohibirían su disfraz?
Mazarbul

César dijo...

Juan H: Hablando de cristianizar, te voy a contar una anécdota. Si te das una vuelta por Madrid fíjate en los monumentos que tengan forma oblonga, fálica, y verás que muchos de ellos tienen una crucecita en la cúspide. ¿Por qué? En Madrid tuvimos un alcalde llamado Álvarez del Manzano, que era un meapilas mayúsculo. Este buen hombre, ofendido por tanto falo en la ciudad, ordenó poner una cruz en cada uno de ellos. Otra anécdota del mismo personaje: En el parque del Retiro está la única estatua pública del diablo, el Ángel Caído. Álvarez del Manzano, consternado, encabezó una suscripción popular para erigir una estatua de la Virgen en desagravio. Y así fue, se reunió la pasta necesaria y se construyó una espantosa estatua de la Virgen. Ahora bien, cuando el alcalde intentó instalarla en el Retiro, llegaron los de Patrimonio Artístico y, muy sensatamente, le dijeron que ni de coña. Y ahora la estatua está en el Parque del Oeste, sin diablo que desagraviar. Afortunadamente, la instalaron en un rincón oculto y no se ve demasiado.

Jarl-9000: Me alegro de que te haya divertido. Es que el asunto tiene mucha coña...

José Antonio: Cuando escribí el post no sabía que eso de las fiestas de santos hasta tenía nombre. "Holy win"... qué ridículo. El equivalente Halloween de los guateques de parroquia.

Juan Constantin: Coño, no sabía eso de San Pancracio y el perejil (lo he tenido que googlear). Pero tienes toda la razón: Si veo a un niño con túnica y una rama de perejil, es San Pancracio. Y como al santo original lo mataron cortándole la cabeza, el niño, además de perejil, deberá llevar una ensangrentada cabeza bajo el brazo.

Samael: Nada más gore que un cristo, tienes razón. Lo gracioso es que primero existió el festival celta de Samhain. Luego, para acabar con esa fiesta pagana, la iglesia superpuso la fiesta cristina de Todos los santos-Los fieles difuntos. Ahora, pasado el tiempo, lo que queda de Samhain -es decir, Halloween- se superpone a la festividad cristiana. Y la iglesia contraataca inventándose esa ridiculez del Holy win... Es de coña.

Anónimo de las 5:39 & Javier: No conocía esa legumbre, pero también la he googleado y tiene una pinta fantástica. El nombre no abre el apetito, pero la imagen de los platos cocinados sí. A ver si la pillo... Mi cadera, mejorando. Y para acabar la segunda parte de "La estrategia del parásito" me queda más o menos un tercio del texto.

Mazarbul: Con San Sebastián pasaría lo mismo.

Juan H dijo...

No tenía ni idea de lo de Alvarez del Manzano, menudo pantallero,al menos los de Patrimonio Artistico saben hacer mejor su trabajo y seguro que no roban ¿Te lo imaginas en la america profunda con traje del Ku Klux Klan? No desentonaría con la cruz ardiendo en la mano; pues si le daba miedo todo lo fálico que no vaya a Barcelona, las veces que he ido,a mí, la entrada o pórtico de la Sagrada Familia siempre me ha parecido un genital femenino, con su clítorix y todo...

Eduardo Mejia Loredo dijo...

¿Y tu de que te disfrazaste Cesar? No le pregunto al viejo escritor bibliómano compulsivo veterano, sino al niño que lleva dentro :)

César dijo...

Juan H: O sea, que la entrada de la Sagrada Familia es... un coñazo (perdona, no he podido resistirme a hacer el chiste fácil). Pues sí, el Álvarez del Manzano era todo un adalid del cristianismo. También dio un montón de dinero (público) a las cofradías madrileñas para impulsar la procesiones de semana santa, que aquí nunca han tenido tradición.

Galactus: Aunque me gusta esta fiesta, no la celebro ni me disfrazo, porque creo que sus auténticos protagonistas son los niños. Tampoco la celebré de niño, porque entonces Halloween solo se veía en la tele o el cine. Pero es una buena pregunta, ¿de qué me disfrazaría si ahora fuera niño? Dado mi tamaño, quedaría bien de monstruo de Frankenstein, pero no sé... Creo que me disfrazaría de BEM (Bug Eyed Monster), monstruo con ojos de insecto. Es decir: alienígena cabrón. Y si no, ya en plan más acorde con la fecha, de Hombre Verde.

Juan H dijo...

Ja, ja, qué bueno, no se me pasó por la cabeza; ahora dejo una pregunta en el aire para el próximo Halloween porque es toda una pesadilla...¿Qué haría Álvarez del Manzano con la torre Eiffel?

Juanma dijo...

¡Felicidades por el Ignotus!

Juanma dijo...

Solo por "Naturaleza humana". No contaba con que hubiera triplete, pero me habría encantado que ganaras alguno más, o bien el de cuento o bien el de antología. En todo caso, enhorabuena. :)

César dijo...

Juanma: Muchas gracias, amigo mío. En cualquier caso, tú predijiste el resultado. Un abrazo.