domingo, marzo 16

Procrastinando


 
            Hace poco, durante mi participación en el Hay Festival de Cartagena de Indias, hubo alguna gente que insistió en llamarme “maestro”, lo cual significa dos cosas: que ellos eran muy amables y que yo soy muy viejo. Porque lo que no soy de ninguna manera es maestro de nada; no creo que ni siquiera llegue a la categoría de discípulo medianamente aplicado. Aunque, bien pensado, sí que soy maestro en algo: en el arte de perder el tiempo, de postergar las tareas, de procrastinar en definitiva.

            Anteayer me puse a escribir una entrada para Babel y, al poco de empezar, me ocurrió algo de lo más normal: cometí un error tipográfico al escribir una palabra cambiando una letra por otra. Pasa mucho, pero a veces resulta que la palabra que obtienes, aunque no exista, parece poseer cierto significado. En concreto, quería poner “escritor” y puse “escrotor”. Y esa nueva palabra, escrotor, se me antojó de lo más sugerente.

            Entonces un rayo cayó del cielo y, sin necesidad de decir Shazam, me transformé en el Capitán Procrastinador. ¿Cuántos neologismos podría inventar basándome en el término “escritor” (y afines), cambiando, quitando o poniendo sólo una letra. Una oportunidad como esa de perder el tiempo no se da todos los días, así que durante los siguientes diez o quince minutos me dediqué con un entusiasmo digno de mejor causa a confeccionar una lista de los nuevos palabros que se me ocurrieron. Ésta es:

 
            Escrotor: Escritor que escribe cojonudamente.

            Rescritor: Escritor que corrige mucho.

            Esgritor: Escritor que lo escribe todo entre admiraciones.

            Escretor: Escritor que escribe mierdas.

            Escrutor: Escritor que se documenta mucho.

            Escrisor: Monja literata.

            Escrior: Escritor muy joven.

            Escrigor: John Norman.

            Escriñor: Escritor español.

            Escrimor: Guionista de Chiquito de la Calzada.

            Escrilor: Escritor aristocrático.

            Descritor: Proust.

            Hescritor: Escritor analfabeto.

            Escristor: Escritor de temas religiosos.

            Escrintor: Escritor hípico.

            Escrithor: 1. Escritor épico. 2. Guionista de la Marvel.

            Esfritor: Escritor que hace novelas como churros.

            Culígrafo: Escritor que escribe con el culo.

            Escrivano: Escritor que escribe cosas sin importancia.

            Escrijano: Cervantes.

            Escrisano: Escritor en buen estado.

            Escrinano: Escritor pequeño.

            Escricano: Escritor maduro.

            Y esto es todo, amiguitos. Una vez más, tío César os ha demostrado que no hay actividad, por estúpida que sea, que no sea susceptible de convertirse en un buen motivo para perder lamentablemente el tiempo.

13 comentarios:

Mazcota dijo...

Gracias por esta clase Maestra de procrastinar.
Procrastinar. Palabra curiosa que, si me concentro mucho, puedo escribir correctamente, pero que, ni dedicando siete años de mi vida a meditar en el Tíbet, sería capaz de pronunciar sin trabarme.

Elena Rius dijo...

Es que perseguir una idea resulta muy divertido. A mí también me sucede a menudo que creo que quiero escribir sobre una cosa y me sale otra. Volátil que es una, sin duda. Por cierto, me gustan especialmente el Escrithor y el Escrijano.

Sebastián dijo...

Me partí de risa con escrothor. Viva la procastinación! Si no fuera por el trabajo a última hora los estudiantes no haríamos nada.

Juan Constantin dijo...

Saludos:

Gracias, César. Siempre viene bien un poco de diversión. Si se hace a cuenta de nuestro idioma, mejor que mejor.
Lo usaré como ejercicio para mejorar el vocabulario de mis chicos (y su sentido del humor, ya de paso). Escrimor, Culígrafo y Escrithor me han llegado al alma.
Con tu permiso, me atrevería a añadir, tras unas cuantas horas de pensar sesudamente en ello;)) alguno más:

Celígrafo: escritor muuuuuy veloz.
Excritor: antiguo juntapalabras.
Eskritor: literato alternativo.
Escritour: plumilla viajero.
Escritano: plumífero calé.
Sexcritor: er... esto... pues eso...

No he seguido, porque mis neuronas (las dos), han entrado en fase de desintegración, ante tanta tensión..

Gracias, de nuevo.

P. E.: Cuidado con el Doctor Sivana y Mister Mind, "gran queso rojo".

César dijo...

Mazcota: No te preocupes: es realmente imposible pronunciarla bien a la primera.

Juan Constantin: ¡Estupendas aportaciones! Me han encantado; sobre todo "celígrafo" y "escritour". Felicidades; ya eres casi tan chorra como yo :))

Y chico, qué placer cuando haces una referencia que crees que nadie va a pillar, y alguien la pilla. El Gran Queso Rojo te lo agradece.

Ferran dijo...

Realmente César me he reído mucho de tu entrada, un poco más divertida de lo normal. He estado 10 minutos bien buenos para intentar captar todas las palabras. Y tengo una pregunta que hacerte: tus mejores ideas han llegado a este mundo de ésta forma o las has meditado concienzudamente?
Siempre supone una alegría leer tu blog.
Un saludo César

César dijo...

Ferrán: Las mejores ideas pueden llegarme en cualquier momento, salvo cuando me estoy esforzando en encontrar una buena idea. Las ideas, creo, son trabajo del inconsciente.

Me alegro muchísimo de que (a veces) Babel te haga reír; la risa es sanísima. Gracias por tus amables palabras.

Samael dijo...

a ver si mañana me animo y pongo algún comentario...

Begoña Argallo dijo...

En mi corta y bastante pésima vida como estudiante, tuve muchos profesores pero pocos maestros. Para mí un maestro es ese ser apasionado por la materia que imparte, tan apasionado que es capaz de hacer que la comprenda hasta el ser más obtuso de la tierra. Como ser obtuso que fui, solo destaqué en las materias en las que tuve maestros, porque solo ellos fueron capaces de repetirme cientos de veces los mismos conceptos, sin cansarse tan siquiera, hasta que los comprendí.
Creo que cuando alguien te llama maestro se refiere a que albergas esa capacidad de hacerte entender por quien escucha.
El término procrastinar hace poco que lo conozco y he descubierto que soy una gran procrastinadora, algo que me exaspera bastante, por cierto, pero siempre procrastino leyendo y escribiendo.
Saludos

Anónimo dijo...

Escribor:
Narrador de aventuras nauticas escritas estando en el lado derecho de su barco

Anónimo dijo...

Yo me quedo con la segunda acepción de...
Escrithor: 2. Guionista de la Marvel.

Eso me hubiera gustado ser a mí.
Por qué no nacería yanqui.

César dijo...

Begoña Argallo: Yo creo que me llamaban así por cortesía...

Anónimo de las 2:51: Muy bueno.

Jarl-9000 dijo...

Sé que ha pasado ya mucho tiempo, pero llevo días queriendo hacer una contribución a esta lista y no he tenido tiempo hasta ahora.

Escriptor:

1. Escritor al que no entiende ni su puñetera madre.

2. Médico.