domingo, enero 8

Cara Care

Hay personas que te caen bien antes de conocerlas. Hace unos años, apareció en el suplemento cultural de El Mundo una crítica de mi novela La catedral, tan positiva, tan laudatoria, que no pude evitar sonrojarme al leerla. Esa crítica iba firmada por Care Santos -para mí, entonces, una desconocida- y, teniendo en cuenta lo mucho que doña Care había hecho por mi ego, no me cuedó más remedio que enamorarme de ella. Luego me enteré de que era escritora, de que vivía en Barcelona y de que, para mi decepción amorosa, estaba felizmente casada y progresivamente llena de hijos. Más tarde nos conocimos de una forma extraña: a través de un foro de Internet en el que ambos participábamos. Finalmente, tras unos cuantos contactos electrónicos, nos vimos en persona y, en lo que a mí respecta, el flechazo fue definitivo.
Care es una mujer inteligente, culta, sensible y muy creativa. Pero, al mismo tiempo, es una de las personas más sencillas, cálidas y cordiales que he conocido. En ella no hay el menor rastro de afectación, ni un ápice de esa egolatría insufrible que aqueja a muchos escritores. Care es, sencillamente, un encanto. ¿He dicho ya que la amo?
Aunque nadie es perfecto, pues ella es la culpable de la existencia de este blog. El pasado 2 de diciembre, recibí un correo electrónico suyo donde me comunicaba la innauguración de su propia blog, El aprendizaje de la soledad. Lo visité y me encantó. Pero también me hizo descubrir algo: mediante Blogger podía crear mi propio blog con toda facilidad. Nunca había pensado en hacerlo; ni siquiera tenía muy claro lo que era un blog, pero resultaba tan sencillo, tan tentador... En fin, mi carísima Care tiene la culpa de que que este blog exista, aunque, claro, de su bobo contenido sólo yo soy responsable.
En cualquier caso, Care vale la pena y su delicioso blog también. En cuanto averigüe cómo se hace, lo incluiré en los links de La Fraternidad. Entre tanto, visítalo haciendo clic aquí:

http://silencioeslodemas.blogspot.com/

9 comentarios:

Care dijo...

Guapo, más que guapo. Ya sabes que tu amor es correspondido desde mucho antes de conocerte. Y después, más. Gracias.

B. Llamero dijo...

Para poner enlaces en tu web, la cosa es más o menos como sigue:

Tienes que entrar en tu Escritorio de Blogger. Una vez allí pincha en el icono de "cambiar valores". Estarás en "Opciones", pero tu pincha "Plantilla". Ahora paciencia, busca en ese galimatías de lenguaje informático, en la parte de abajo, un sitio donde ponga, por ejemplo:
href="http://news.google.com/"
>Google News<

Solo tienes que cambiar lo que está entre comillas, por la dirección que quieres. Y los que está entre > < es lo que se leerá en el Blog: así que ahí cambias Google News por El Blog de Care, pongo por caso. Y así con todos. Cada vez que quieras añadir un enlace, copia y pega alguno de los que tengas y sustituye estos valores.

No sé si con esto te valdrá, porque es difícil explicarlo en este espacio tan constreñido.

Ah, y cuando lo leas, te sugiero que borres este post, porque no es precisamente para nota, ¿no?

B. Llamero dijo...

Se me olvidó un advertencia clave. La Plantilla es del código genético de tu Blog. Si te equivocas lo puedes dejar con malformaciones congénitas irreparables. Por eso, cada vez que cambies algo, antes de darle a "Guardar cambios", pulsa "Vista previa". Si es lo que querías ya lo guardas, si no lo es, pulsas "borrar cambios" y aquí no ha pasado nada.

Anónimo dijo...

Entré no hace mucho en una web de Care, que me gustó mucho, con enlaces también muy interesantes de amigos suyos escritores.

Hay que reconocer que el internet es genial en este sentido. Te permite conocer bastante (que no suficiente, claro)información que de otra forma te costaría la misma vida conseguirla. Y para los aficionados a la literatura como yo, mantener contacto con escritores y autores, aunque sea desde la barrera. En mi caso web como las de cyberdark, por poner un ejemplo, fueron un descubrimiento. Así como otros blog y paginas, como las de Crisei, Rodolfo Martines, Negrete, y ahora Cesar y Care (me dejo unos pocos sin nombrar, claro).
Que por cierto Cesar, podrías colocar algo de Info sobre tu producción literaria (si eres capaz de descifrar los galimatías cabalísticos necesarios para ello, claro).

Anónimo dijo...

Yo conocí a Care hace muchísimos años. Puede decirse que viví sus inicios desde una interesante proximidad. La he visto crecer como escritora y como persona, he disfrutado de sus buenos momentos y sufrido con ella cuando los momentos han sido menos buenos. Me enorgullece poder decir que soy uno de los afortunados que goza de su cariño y que, por supuesto, ella tiene todo el mío. Coincido en que es una mujer inteligente, culta, ingeniosa, divertida y cálida, que se vuelca en sus amigos con aquella pasión que los amigos de verdad merecen, y que desde hace unos -pocos- años, ha descubierto la maternidad múltiple y la disfruta con la misma entrega y pasión que pone en todo lo demás. Conozco a su marido, un madrileño cojonudo, y adoro a sus hijos.
Puedo decir que le di biberones cuando pesaba menos de cinco quilos, que la llevaba al colegio en mi moto sentada entre el manillar y yo cuando apenas tenía seis años, y que creo fui su confidente de juventud o el hombro en el que apoyar su cabeza cuando lo necesitó. Con los años los papeles se han invertido en ocasiones, y ella ha sido mi confidente, amiga y apoyo moral. Yo viví sus inicios en la literatura y ahora disfruto leyéndola. Es la mejor hermana que se puede desear, y cuando en momentos como este echo la vista atrás, me siento orgulloso de poder decirlo.

Care dijo...

Quienes me conocen saben que mi hermano mayor es mi debilidad. Estoy tonta por él. Ahora creo que ha quedado claro por qué motivo, ¿verdad? Bueno, César, mira la que has liado, grandullón. El otro día le hablaba de ti a Claudio. Estoy convencida de que os caeríais muy bien. Él es lector de ciencia ficción, gran conversador, gourmet, hombre de mundo y, encima, médico. Tendré que convocaros alrededor de una cena suculenta. Hoy, después de lo que ha pasado hoy aquí, me voy a dormir con el corazón bien abrigado. Gracias.

Anónimo dijo...

¡Sólo me faltaba que el tripartito se meta en mis apreciaciones personales, Sr. de Olmedo!. Ya sería lo último. Así que me reafirmo en lo dicho a la par que me apunto inmediatamente a esa cita alrededor de una mesa en el momento en que sea convocada. La idea de reunir en un sólo lugar varias de mis mayores devociones (Care, tu mismo, gastronomía y tertulia -incluso si es de ciencia ficción, que me encanta-) se me hace absolutamente tentadora, y la posibilidad de compartir con César, del que Care habla maravillas, la convierte en doblemente apetecible. Cuando queráis.

César dijo...

Care: gracias a ti por ser tan maja.
Braulio: a ti también te amo. Muchas gracias por la información; eres muy amable.
mazarbul: es un placer contar con visitantes como tú. Y sí, estoy empezando a comprender que lo bueno de los blogs son la posibilidades de interconexión, la creación de redes. En cuanto a teóricas informaciones sobre mi producción literaria... la verdad es que este blog está conducido por César-lector, no por César-autor...
En lo que respecta a esa cita gastronómica, sólo puedo decir que estoy tan abierto a ella como lo estaba Linda Lovelace a sus compañeros de reparto.

Anónimo dijo...

What a great site »