martes, marzo 7

El plagio Da Vinci

Dan Brown, autor de El código Da Vinci, ha sido demandado por dos escritores ingleses, Michael Baigent y Richard Leigh, bajo la acusación de plagiar una obra de estos últimos, Holy Blood, Holy Grail. Lo gracioso es que Baigent y Leigh tienen toda la razón del mundo; pero lo más gracioso de todo es que, probablemente, no podrán demostrarlo.

Veamos; Holy Blood, Holy Grail, llamado en España El enigma sagrado, es un ensayo histórico (?) cuya tesis puede resumirse así: Jesucristo se casó con María Magdalena y tuvo hijos. Después de la diáspora, María Magdalena y la descendencia de Jesús emigraron a Francia, donde entroncaron con la dinastía Merovingia. Mucho después, Pipino el Breve derrocó a Childerico III, el último rey merovingio (y supuesto descendiente de Jesús), acabando con el linaje. Pero no, por lo visto no acabó con él, pues un desconocido hijo de Childerico emparentó con los Saint Clair, convirtiéndose así esta familia en la (supuesta) descendencia de Jesús. Entre tanto, en la Edad Media, se fundan los Templarios y en su seno surge una sociedad secreta llamada el Priorato de Sión, cuyo objetivo es proteger el Grial. ¿Y qué es, según los autores, el Santo Grial? La corrupción de la expresión Sang Real, sangre real, la sangre de Cristo: su descendencia.

¿Os suena? Sí, ahí está todo el trasfondo de El código Da Vinci, de pe a pa. Y no es de extrañar, porque Brown, más bien poco riguroso el hombre, se documentó para escribir su novela, como él mismo reconoce, en dos o tres libros sensacionalistas, entre los que se encontraba El enigma sagrado. El problema estriba en que la obra de Baigent y Leigh es, supuestamente, un documentado ensayo acerca de hechos históricos reales. Y si son hechos históricos, cualquiera puede escribir sobre ellos. Así que Baigent y Leigh sólo tienen dos opciones: o reconocer que El enigma sagrado se lo han inventado ellos y, por tanto, la novela de Brown es un plagio, o seguir insistiendo en que su ensayo describe hechos reales y demandar a Brown en base a alguna triquiñuela legal. Creo que han hecho eso último, porque, en contra de lo que dice la prensa, ellos han vendido un porrón de ejemplares de El enigma sagrado, y no es cosa de confesarle a sus rendidos lectores que todo ese asunto es un puro disparate. Pillados por su propia mentira; podría decirse que es justicia poética, si no fuese porque Brown saldrá de rositas, pese a ser un plagiario de tomo y lomo.

El enigma sagrado comienza con el misterio de Rennes le Château. ¿Habéis oído hablar de este asunto? A finales del siglo XIX, Bérenger Saunière, el humilde párroco del no menos humilde pueblo occitano de Rennes le Château, encontró en el balaustre hueco de una columnata visigótica de la iglesia parroquial ciertos pergaminos cuyo contenido nunca ha quedado del todo claro, aunque los rumores aseguran que entre ellos había una genealogía y dos mensajes cifrados. Saunière viajó a París con los documentos y, a su regreso, comenzó a gastarse una fortuna en arreglar la iglesia. Luego, se construyó una casa y una torre neogótica e hizo numerosas reformas en el pueblo. Vamos que, sin saber cómo, se hizo millonario de la noche a la mañana. Se calcula que entre 1890 y el momento de su muerte, Saunière gastó el equivalente a 20 millones de francos previos al euro. ¿De dónde salió el dinero? La versión oficial es que el párroco se dedicaba al tráfico de misas; pero, joder, ¿con cuántas misas tenía que traficar para obtener tanta pasta? No, no tiene sentido. Además, hubo otros sucesos para los que no hay explicación. Saunière hizo excavaciones en el cementerio y borró una extraña lápida, hubo una tumba misteriosa en mitad del campo, un cuadro de Poussin, enigmáticas inscripciones en la iglesia y, posteriormente, asesinatos. Vamos, todo un folletín; pero fascinante.

Por eso, por su vinculación con el misterio de Rennes le Château, leí El enigma sagrado. La teoría de Beigent y Leigh es que Saunière encontró documentos que confirmaban la existencia de un linaje secreto de Jesús y, o bien chantajeó al Vaticano, o bien obtuvo dinero de los monárquicos franceses. En fin, las pruebas que aportan –ciertos panfletillos depositados en la Biblioteca Nacional Francesa durante los 50 y 60- carecen de la menor consistencia. El enigma sagrado es un disparate detrás de otro. Pero también es muy divertido; mucho más que El código Da Vinci de las narices. La trama que describen Baigent y Leigh (y un tal Lincoln que no se ha sumado a la demanda), es tan absurda como bien urdida; en cierto modo, me recuerda a lo mejor de El péndulo de Foucault. Si te lo tomas como si fuera un “ensayo-ficción” y dejas un momento en suspenso la incredulidad, puedes pasar un buen rato leyéndolo, porque en su contenido hay argumentos para cien novelas ocultistas. De hecho, la saga de Los hijos del Grial, de Peter Berling, también está basada en El enigma sagrado.

El problema, claro, es creérselo, como miles de lectores de El código Da Vinci creen que son reales las bobadas pseudohistóricas que el prota de la novela vierte a diestro y siniestro en un aburrido acceso de incontinencia verbal. Dan Brown, aparte de mal escritor y plagiario, es un inculto.

Pero, bueno, por lo menos hace leer a la gente...

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno, veo que inauguro yo el día.

Bien, bien, a mí tampoco me gustó El código Da Vinci, me pareció apresurado, laísta, mal documentado, culebronero, y si, además, tú dices que es un plagio... ya no le queda nada.
Menos mal que mi cerebro tiene una muy limitada capacidad de almacenaje porque solo me faltaba comenzar ahora a preocuparme por cuestiones sanguinolentas -que no sanguíneas- . Ya tenemos más que suficiente con la gente que piensa en el color de la sangre -azul- o en su Rh -racistas- y no necesitamos preocuparnos, además por su origen ¡divino!.

Anónimo dijo...

Muy divertido. Yo también leí en su momento El enigma sagrado (se lo regalé hace muchos años a mi padre porque le encantaban los de templarios y luego me lo léi yo) y estoy de acuerdo con todo lo que dice César. Sin la menor credibilidad histórica y partiendo de una serie de "apriorismos" indemostrables que llegan a ser sonrojantes, es justo el tipo de obras "conspiracionales" que parodiaba con gran acierto Umberto Eco en El péndulo de Foucault pero aún así sigue siendo mucho más divertida que los dos tostones de Dan Brown y Peter Berling (éste aún más que el otro) que, en efecto, lo saquean y plagian vilmente y sin ningún recato.

B. Llamero dijo...

Cuánto sabes, jefe. Con gente como tu, jobar, esto de plagiar se va a poner complicado.
El próximo negro que contrate serás tu: ¿a qué ahí he estado bien?
Siempre tuya, Ana Rosa.
(Bueno, para escribir este post contraté de negro a ese Llamero, que andaba el pobre con algo de necesidad)

Anónimo dijo...

Queridos míos,

El Código es un tipo de literatura poco "valiosa": O sea que no vale nada.

PERO ha hecho leer a gente que casi nunca lee, ha hecho que se hable de libros en las tertulias de café, de vecinos... Ha hecho que ¡se vendan libros!

Y no olvidemos la receta de su éxito: es muy "enganchante". Usa la fórmula de "la zanahoria": Es emocionante que encuentren un pergamino donde está "la clave de todo", y cuando lo encuentran ya te importa un pepino, porque ahora hay que buscar una piedra, y luego, una caja, y luego una arqueta... (bueno, muchos cachivaches que he olvidado). La cuestión es que te pasas el libro corriendo detrás de distintas zanahorias, y cuando llegas al final, pluff, pues no es una zanahoria muy sabrosa que digamos... ¡Y mira que la hemos perseguido!

La "técnica de la zanahoria" y del "enganche" habría que copiarla y/o mejorarla.

Por otro lado: resulta que los abogados de Brown, y la otra pareja del Enigma Sagrado están pagados por la misma editorial. (Todos han publicado con no-sé-quién). Total, que harán un apañillo - acuerdo -, les pagarán una pasta a la pareja, ¡y todos tan contentos!

Otra anónima.

Anónimo dijo...

También me leí el enigma sagrado (d ehecho aún lo conservo) y estoy de acuerdo con vosotros que era más interesante y divertido que el libro de Brown. Lo que no estoy de acuerdo es el calificativo de plagio. Uno es un ensayo histórico (¿? como bien dice cesar), pero el otro es una novela,mala o buena, pero los personajes y trama, lugares etc... son completamente diferentes, aunque el tema sea el de la descendencia de jesus.
Por tanto ¿qué es un plagio?. ¿Que tenga un tema parecido o incluso el mismo? No lo creo. Veamos: La conquista de marte. Es un tema. Y tenemos dos libros, uno de bradbury y otro de Robinson. ¿Son plagios (al margen del valor de las obras, no entramos en ello)?
Otro: un mago descubre que los dioses malos van a volver y coge a un discípulo para que le ayude. Salen dragones, enanos, elfos, y otros bichos. Al final ganan los buenos. LOs temas del fantasticos son muy parecidos, pero ¿son plagios unos de otros?.
En fin, que es complicado aplicar la palabreja salvo que sea muy evidente (por eg.: 80 páginas copiadas sin piedad). Por eso NO creo que sea un plagio.

César dijo...

Llamero-Quintana: soy tu hombre. Voy a escribirte una novela guapísima sobre sexo y adulterio. Creo que se va a llamar "Mdme. Bovary"...
Cristian: lo dicho, como una cabra. Sigue así ;-)
Anónima de las 12:02 PM: tienes razón, y ya lo apuntaba yo en la entrada, Brown será lo que sea, pero ha hecho leer a gente que le da grima hasta coger una guía de teléfonos. Y la técnica de los "sucesivos misterios" es muy vieja, sí; pero se puede hacer bien o mal, y Brown lo hace mal. En cuanto al chanchullo del juicio, pues probablemente tienes razón. Incluso es posible que todo sea un montaje publicitario para acabar de exprimir las ventas de ambos libros, vete tú a saber.
Mazarbul: no se trata de un plagio total, está claro, pero sí muy sustancioso. Veamos: una novela puede dividirse en "argumento" y "peripecias". Ambos términos, en lenguaje militar, serían el equivalente a "estrategia" y "táctica". Pues bien, en el caso de "El código Da Vinci", la táctica, es decir, todas las peripecias que afectan a los personajes, la trama policíaca, los malos y los buenos, etc., pertenecen indiscutiblemente a Dan Brown. Sin embargo, con la estrategia no sucede lo mismo, pues gran parte del argumento está tomado directamente de "El enigma sagrado". El matrimonio de Jesús con la Magdalena, su descendencia, el Priorato de Sión..., todo eso pertenece a Baigent y Leigh.
La cuestión, como tú dices y yo ya señalaba en la entrada, es determinar si "El enigma sagrado" es un ensayo histórico o ficción. Si es lo primero, no hay plagio, pero sí lo hay en el segundo caso. Y tú y yo sabemos que "El enigma sagrado" es pura ficción... Otra cosa será lo que decida el juez.

Anónimo dijo...

Si. la paradoja es curiosa. Si es verdad no es plagio, y si lo es, es mentira (o ficción vamos). Aunque posiblemente sea maniobra comercial. Fíjate que para empezar estamos todos hablando d eun libro que nos leímos hace ya 15 años por lo menos, y del que no nos hemos acordado si no es por el tema del posible plagio. De todas formas, de una forma genérica, lo de plagio siempre me ha llamado la atención. A veces es muy sutil la frontera. Incluso la diferencia puede ser que hatsa el plagiador escriba mejor!!! Si os acordais de cela, tuvo un tema parecido con otra obra. Yo no me leí ninguna d elas dos, pero un amigo mío que lo hizo me dijo que aunque así pudiera ser , por temática, y peripecias como tu explicas, la de cela era mil veces mejor. La original era zafia y burda, sin el menor sentido literario. Mientras que en la otra se notaba la mano de un escritor. Lo que no me acuerdo es que fue lo que dictaminaron.

Anónimo dijo...

toma enigma:
http://mandaryaku-es.blogspot.com

Angel dijo...

Interesante tu opinión. ¿Por que es sólo eso, verdad?. Una opinión. Una mas...

No hay documentos que demuestren que esas teorías pueden ser correctas. Cierto. Pero ¿puedes mostrarnos esos documentos que supongo estarán en tu poder y que demuestran que es sólo un disparate (pero muy divertido)?.

Yo no afirmo desde luego que esa teoría sea cierta, pero al menos habrá que darle el beneficio de la duda, ya que salvo que alguien me enseñe algún documento que demuestre que es sólo un disparate tendremos que darle la misma credibilidad que a un libro que habla de muertos resucitados, gente que hace windsurf sin tabla ni nada, ó palomas que engendran seres humanos. Y eso si que es VERÍDICO ¿verdad?...

En fín, sin entrar en temas de creencias ó que me creo todo lo que me cuente alguien con sotana sin cuestinarme nada mas. Y ateniendose solamente a lo que se puede demostrar. ¿Cual es la diferencia entre lo que dice este libro y lo que dice la iglesia?¿Que documentos has visto tú a los cuales los demás no hemos podido jamás tener acceso y que demuestran sin ningún tipo de dudas la veracidad de los hechos en los que se sustenta la religión católica?.

Por cierto Rickard, para divertido, divertido, eso de "partiendo de una serie de apriorismos indemostrables que llegan a ser sonrojantes". ¿Y como calificarías un libro que habla de zombies y palomas sementales?...

Por supuesto también opinarás que esas teorías de que el Vaticano colaboró con los nazis para su huida a Sudameríca son absurdas, y que libros como Odessa son un disparate. Y que los casos de abusos a menores cometidos por sacerdotes y ocultados por la "Santa Sede" son todo invenciones "fascinantes y divertidas".

En cualquier caso te felicito por tu blog. Es interesante que cualquier persona (documentada ó no), pueda compartir su opinión e incluso en algunos casos considerarla para si mismo y para otros como dogma de fé. Me alegro de haber leido tu blog. Me ha parecido fascinante y divertido.

Un saludo.

César dijo...

Ángel: Lo siento, amigo mío, pero yo no tengo por qué aportar ningún documento. Quien propone una tesis, ha de aportar las pruebas que la soporten. Si no las aporta, sus afirmaciones no serán más que hipótesis sin confirmar. Así funciona el método científico, qué le vamos a hacer.

Por otro lado, ¿de dónde demonios te has sacado que Rickard o yo creamos en las chorradas de la Biblia? Las religiones, incluyendo la cristiana, son un montón de disparates. Pero no son los únicos disparates que existen. Las afirmaciones de "El enigma sagrado" también lo son.

O sea que tú has interpretado mi texto como una reivindicación de las doctrinas cristianas, ¿no? Pues joder, macho, qué equivocado estás. ¿Y dices que has leído mi blog? Será en diagonal, porque si lo hubieras hecho con un poquito más atención sabrías que soy ateo.