Ya llegó el verano para acariciarnos
con su tórrida mano, se acercan los tiempos de la molicie, el tinto de verano y
los chapuzones, así que, para compensar la amarga negrura de mi anterior post,
vamos a refrescarnos un poco.
Os propongo un juego: Voy a
mostraros 25 diálogos de película y vosotros tenéis que averiguar a qué título
corresponde cada uno. Los hay fáciles, los hay difíciles y alguno que otro
tiene trampa. La única condición que he seguido para elegirlos es que todos los
habría acertado yo. Por supuesto, si fueran otras frases probablemente fallaría
alguna; pero estas no. ¿De acuerdo? Pues adelante; primero pondré todos los
diálogos uno detrás de otro y luego las soluciones.
1. “Louis, presiento que este es el comienzo de
una hermosa amistad”.
2. “Tomaré lo mismo que ella”.
3. “¿Sabes silbar, verdad Steve? Solo tienes que
juntar los labios y soplar”.
4. “Volveré”.
5. “¡Stella! ¡Stella!”.
6. “Shane. Shane. ¡Vuelve!”.
7. “¡Está vivo!, ¡está vivo!”.
8. “El mejor amigo de un chico es su madre”.
9. "Está usted intentando seducirme, ¿verdad?".
10. "Elemental, mi querido
Watson".
11. “¿Quiere parar, Dave? Pare, Dave.
Tengo miedo...”.
12. “Dios mío, está lleno de
estrellas.”
13. “Fue la Bella quien mató a la
Bestia".
14. “Amar significa no tener que decir
nunca lo siento”.
15. “Buenos días… y por si no volvemos
a vernos: buenos días, buenas tardes y buenas noches”.
16. “Hazlo o no lo hagas, pero no lo
intentes”.
17. “Tócala otra vez, Sam”.
18. “Francamente, querida, me importa
un bledo”.
19. “Vamos a necesitar un barco más
grande”.
20. “¡Eres tan feo que podrías estar
en un museo de arte moderno!”.
21. “Y como alguno de vosotros vuelva
a maltratar a otra puta, volveré aquí y os mataré a todos, malditos hijos de
perra”.
22. "¡Alcalde, todos somos
contingentes pero tú eres necesario!”.
23. “Elegí un mal día para dejar de
fumar”.
24. “Soy tu mayor admiradora”.
25. "¡Caballeros, no pueden
pelear aquí: esto es el Salón de la Guerra!".
SOLUCIONES:
1. La primera es muy facilita: Es lo que le dice Humphrey
Bogart a Claude Rains justo al final de Casablanca,
mientras se pierden en la niebla. Siempre he pensado que ese final era en
realidad el principio de otra película que, afortunadamente, jamás se rodó
(aunque hubo el proyecto de una continuación que se llamaría Brazzaville). Mejor; así podemos imaginar libremente
qué fue de Rick y el capitán Renard, ese par de cínicos románticos.
2. Sentados a
la mesa de un restaurante, Billy Crystal le dice a Meg Ryan que una mujer no
puede fingir un orgasmo sin que el hombre se dé cuenta. Ella le responde
fingiendo un orgasmo tan convincente como escandaloso. Una de las comensales,
que asiste asombrada a la escena, le dice al camarero: “Tomaré lo mismo que
ella”. Eso ocurre en Cuando Harry encontró a Sally.
3. Una
asombrosamente bella y sexy Lauren
Bacall le dice a Humphrey Bogart que si quiere algo de ella, silbe. A
continuación, le suelta la frase en cuestión. La peli es Tener y no tener.
4. Todos los
merodeadores frikis lo habéis adivinado al instante. ¿Quién podría pasar a la
historia del cine con un diálogo de una sola palabra? Solo Arnold Schwarzenegger,
en Terminator.
5. Es lo que
grita Marlon Brando en Un tranvía llamado deseo, de Elia Kazan, basada
en la obra de teatro de Tennessee Williams. Confieso que todos los personajes
de esta película me caen fatal. Sobre todo, la insoportablemente cursi Blanche DuBois.
6. Otro grito
desesperado, esta vez el de un niño llamando a un pistolero arrepentido, la
única figura paterna que ha conocido. En el extraordinario western Raíces
profundas (que sirvió de inspiración a Clint Eastwood para hacer El
jinete pálido).
7. Eso es lo
que grita Victor Frankenstein cuando su monstruo cobra vida en Frankenstein,
de James Whale. Todos los frikis lo sabíais, ¿verdad?
8. Se lo dice
un inquietante Anthony Perkins a Janet Leigh poco antes de matarla. ¿Os suena
el Motel Bates? Estamos hablando de la inmensa Psicosis, del gran
Hitchcock.
9. Si digo “Sra.
Robinson” todo está más claro, ¿no es cierto? Debí de ver El graduado
cuando tenía quince o dieciséis años, y se convirtió en la película favorita de
mi primera juventud, quizá porque me sentía tan confuso como Dustin Hoffman.
10. Claro,
esto tiene trampa, porque esa frase se ha dicho en mil películas, aunque jamás
en los relatos de Conan Doyle. Pero, ¿en qué film se dijo por primera vez? Pues
en Las aventuras de Sherlock Holmes, de 1939, con Basil Rathbone como
protagonista, uno de los mejores Holmes de la historia.
11. Los frikis
no solo lo habrán sabido a la primera, sino que además habrán experimentado un
orgasmo. Ese diálogo no lo pronuncia un ser humano, sino el ordenador HAL 9000
antes de morir en 2001: Una odisea del espacio.
12. Esto ya es
más peliagudo y solo los auténticos frikis de mente y de corazón podrán
responderlo. Esa frase es la última que pronuncia el astronauta Dave Bowman
antes de “entrar” en el monolito gigante de 2001 que orbita en torno a Júpiter.
Sin embargo, no se pronuncia en la película de Kubrick (aunque sí en la novela
de Clarke). Esa frase es la que abre la secuela dirigida por Peter Hyams, 2010:
Odisea dos. Un film nada desdeñable, aunque inevitablemente eclipsado por
su precedente.
13. Si alguno
no ha sabido responder a esto... en fin, no sé si se merece merodear por Babel.
Estamos hablando de la frase final de una de las más maravillosas películas de
todos los tiempos: el King Kong de Merian C. Cooper y Ernest B.
Schoedsack. Este año se cumple el 90 aniversario de su estreno.
14. De todas
las frases gilipollas que se han pronunciado alguna vez en cualquier película,
esta es la más estúpida de todas. No solo era un diálogo, sino que además se
convirtió en el eslogan del film: Love Story, una de las más cursis,
tramposas y lacrimógenas películas jamás rodadas.
15. Lo dice
Jim Carrey en la que sin duda es su mejor película: El Show de Truman.
16. Hablando
de frases gilipollas, esta lo es y mucho. Se lo suelta Yoda a Luke en El imperio
contraataca. Es una de esas frases estilo zen que parecen llenas de sabiduría,
pero ¿qué significa en realidad? ¿Que hay que hacerlo todo bien a la primera?
¿Que no hay que ensayar y entrenar? Menudo instructor de mierda el enano
orejotas.
17. ¿Habéis
caído en la trampa? Porque esa frase jamás se pronuncia en Casablanca.
En realidad pertenece a Sueños de un seductor, la película de Herbert Ross
basada en la obra de teatro de Woody Allen Play It Again, Sam.
18. Otra
facilita. Es lo que todos estábamos deseando que Rhett Butler le dijera a la fascinante pero
insufrible Escarlata O’Hara, en Lo que el viento se llevó.
19. Se lo dice
Roy Scheider a Robert Shaw en Tiburón la primera vez que ve al bicho. Y
tenía razón.
20. Uno de los
múltiples y sofisticados insultos que profiere ese maestro de la humillación
que es el sargento Hartman, en La chaqueta metálica.
21. Sencillita
también. Es lo que advierte William Munny mientras se aleja del pueblo en la
noche, bajo la tormenta, después de haberse cargado al sheriff "Little
Bill" Daggett y a sus ayudantes. Estamos hablando de esa soberbia obra
maestra que es Sin perdón.
22. También
fácil. Se trata de uno de los surrealistas diálogos de Amanece, que no es
poco.
23. Con esta
frase inicia Lloyd Bridges (el papá de Jeff) su progresiva inmersión en el
pánico, en Aterriza como puedas, la más descacharrante sucesión de gags
jamás filmada.
24. Si eso te
lo dice una enfermera de mediana edad, gordita y con una bondadosa sonrisa,
puedes confundirlo con un halago. Pero si la enfermera es Kathy Bates y la
película Misery, entonces es la antesala del infierno.
25. Es lo que
exclama el presidente de Estados Unidos, interpretado por Peter Sellers, en una
parodia muy negra sobre la guerra fría llamada Teléfono rojo, volamos hacia
Moscú.
Pues eso es todo.
¿Cuántas habéis acertado? Yo diría que si son trece o más ya podéis consideraos
cinéfilos de pro. Y si son menos... bueno, puede que algunos de esos diálogos
no os sonaran. Pues ahora ya os suenan; para que luego digan que Babel no sirve
para nada.
Con este refrescante
juego, me despido de vosotros hasta quién sabe cuándo. Por si acaso, feliz
verano.