miércoles, diciembre 9

Babel 15

 


            Quince años han transcurrido desde aquel lejano diciembre de 2005 en que me dio por crear La Fraternidad de Babel. Quince largos años en los que ha sucedido de todo, incluyendo esta distopía vírica que nos rodea. La niña bonita... ¿por qué se le llama así al 15? ¿Es que las niñas de 16 ya no son bonitas? Da igual, el caso es que quince son un montón de años.

            Entre las muchas cosas que han ocurrido durante este tiempo, los blogs han pasado de moda. Afortunadamente, porque cuando inicié Babel brotaban como hongos. Y qué horror de blogs, amigos míos. Como estaban de moda y eran gratis, todo dios tenía su blog; olvidando que un blog hay que alimentarlo, lo cual implica tener algo que decir. Y la mayoría no tenía nada que decir.

            Yo sí que tengo; gilipolleces en su mayor parte, pero la clase de gilipolleces que no tienen cabida en ningún otro lugar. Así que Babel sigue adelante, aunque ha estado a puntito de desaparecer. Blogger cambió su interfaz y empecé a tener todo tipo de problemas, como por ejemplo que desaparecieran los puntos y aparte, o que no pudiera cortipegar textos de Word. Era imposible seguir así, de modo que a punto estuve de tirar la toalla y abandonar el blog. Entonces, en el último momento, se me ocurrió algo: Yo estaba usando Explorer, un navegador que ya me había causado algún que otro inconveniente, así que lo cambié por Chrome. Y todos los problemas se solucionaron como por arte de magia (quizá el que Blogger pertenezca a Google tenga algo que ver). Sea como fuere, ¡larga vida a Babel!

            Que 2020 está siendo un año de mierda es evidente. Su única ventaja es que todo el mundo lo recordará fácilmente. ¿Cuándo fue el año de la plaga? El veinte veinte, está chupado. Es como la batalla de las Navas de Tolosa, que todo el mundo sabe que ocurrió el doce doce. Por lo demás, un año horrible, Y para mí, muy triste. En marzo murió mi querido padrino Josep María Gispert. Y en mayo murió Isabel González Lectte. ¿Quién era esa mujer? Fue más conocida como Patricia Montes y era una de las más populares escritoras de novela romántica durante los 50, 60 y 70 del pasado siglo. Ella y su marido, Antonio Martínez Torre, fueron los mejores amigos de mis padres. Así que, en el mismo maldito año, se han ido quizá las dos últimas personas de mi pasado más remoto, dos personas muy queridas por mí. En fin...

            Basta de tristezas, que esto es un cumpleaños. 2020 también es un año en el que he escrito mucho. El año en que he publicado El Círculo Escarlata, la segunda parte de Las lágrimas de Shiva. El año en que he continuado mi incursión en la literatura infantil, con tres novelas. Y otras buenas noticias de las que, si los dioses son propicios, ya os informaré. Ah, claro, y es el año en que, después de cinco lustros, me han operado para alicatarme el tabique nasal. De momento es chungo, porque llevo tres semanas moqueando; pero me han jurado que luego respiraré como los ángeles.

            Para la tranquilidad de mi ánimo, ya he acabado el tradicional cuento de Navidad y no tengo que estar escribiéndolo hasta el último momento, como en tristes ocasiones ha sucedido (una vez lo acabé el mismo día 24). Se llama “El poni” y... ¿será tan dulce como las manos que lo han escrito, tan bondadoso y apacible como el cerebro que lo ha pergeñado? ¿O será gamberro, irreverente y maligno, como el lado oscuro de mi alma?. El 24 lo descubriréis, si así os place.

            En fin, es el décimo quinto cumpleaños de La Fraternidad de Babel. Os voy a decir lo mismo que os digo todos los años: Imaginaos que estamos en un viejo café, reunidos en torno a un velador de mármol. Es de noche; a través del ventanal que se abre a la calle vemos caer la nieve. Alzamos nuestras jarras de cerveza y brindamos por el blog.

            ¡Feliz cumpleaños, merodeadores!

15 comentarios:

Jarl-9000 dijo...

¡Feliz cumpleaños! Brindemos por las cosas que tienes que decirnos, sean gilipolleces o no. ¡Chin, chin!

Una curiosidad que tiene el quince es que es el último número del grupo de los 10 que no se construye como diez y algo, sino al revés: once es 'uno y diez(ce)', doce es 'dos y diez(ce)', etc. No obstante, por lo que tengo entendido, antiguamente le pasaba por lo menos lo mismo al dieciséis, que se llamaba también seice. De hecho, de ahí es de donde le viene el nombre a los seises de la catedral de Sevilla, aunque actualmente ya no sean tantos. Y, hablando del 16, me imagino que, si acaso, habrá dejado de ser la niña bonita para convertirse en la muchacha bonita.

Espero ansioso el cuento de Navidad. Con ese nombre y, sabiendo que es tuyo, miedo me da. ;)

Fe de erratas: has confundido "El Círculo Escarlata" con el "El Círculo de Jericó".

Elena Rius dijo...

¡Por muchos años más de Fraternidad de Babel, César!

Jane Jubilada dijo...

Enhorabuena por esos 15. Yo voy camino del 13. Ya me estoy viendo, a ti y a mí, igual que los viejos rockeros. Pero aquí seguimos porque en el fondo se disfruta.
Me da que el cuento de navidad no va a ser dulce como el turrón. Impaciente estoy.
Un abrazo, César, y a seguir adelante.

César dijo...

Jarl-9000: Interesante disertación sobre los números. Y gracias por advertirme de la errata; eso me pasa por escribir dos libros que empiezan por "El círculo".

Elena Rius: Y que nos sigamos leyendo aquí y en tu blog, amiga mía.

Jane Jubilada: Los viejos rockeros nunca morimos, querida. Así que no crees que mi cuento sea dulce, ¿eh? Qué mal pensada eres. Y cuánta razón tienes.

Anónimo dijo...

Pues muchas felicidades y con gusto infinito alzamos esas jarras de cerveza bien fría para celebrar la vida,el ingenio,la inteligencia, el sentido del humor y una pizca de mala leche....A por otros quince.
Besos cerveceros de Aurora Boreal

Jose Ant. Sánchez dijo...

Feliz cumpleaños y que por muchos más pueda seguir leyéndote, tanto aquí como en tus libros.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Felicidades, un abrazote. Gracias, César.

Quique dijo...

Felicidades. Y a seguir, aunque sea, por mi parte, simple, llano y sano egoismo

Anónimo dijo...

Muchísimas felicidades y gracias por tantos buenos ratos leyendo tu blog. Por muchos más!!!

P.D.: Acabo de leer tu breve entrevista en Babelia, sencilla y muy bien.

JoseA dijo...

¿Qué se dice en estos casos? ¿Felicidades o enhorabuena?
Enhorabuena parece señalar al logro de haber llegado y felicidades, en cambio, apunta más a que mereces que te revierta felicidad. Sea como sea, y aunque yo haya sido hasta ahora un merodeador que solo lee, te deseo ambas cosas.
Como han dicho por aquí, solo me mueve el más sano egoismo.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Felicidades y chin chin!!!!! Es un placer que el café siga abierto. Se agradece.

Mazarbul

Dorotea Hyde dijo...

Muchas felicidades. Yo que soy una recién llegada, espero que el blog siga abierto mucho tiempo.
Un saludo.

borodinjs dijo...

Muchas felicidades César, he disfrutado mucho con tus recuerdos y comentarios, libros y relatos. Y esta página es siempre un refugio seguro, no la dejes.

Miguel Valle dijo...


¿Y no celebras quinceañera y te pones de tiros largos? ;)

Gracias por ese tiempo que dedicas a contarnos tus chorradas y a mantener este resquicio de paz, confort y buena conversación.

A por los siguientes quince.

Saludos

Miguel

willierfelton dijo...

This is a great blog and has great things for sharing,

Regards,
Engine Rebuild UK